IDEA Internacional y el Instituto Electoral de la Ciudad de México exploran posibilidades de colaboración

El pasado 16 de noviembre se reunieron en la Ciudad de México Miguel Angel Lara Otaola –jefe de la Oficina Subregional para México y Centroamérica—y Yuri Beltrán Miranda—consejero electoral del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM)–. En el encuentro se exploraron posibilidades de colaboración entre ambas instituciones y de acompañamiento a los procesos electorales y de participación ciudadana en la Ciudad de México. En particular, se detallaron las modalidades en las que IDEA Internacional puede contribuir al trabajo del IECM en materia de mecanismos de democracia directa, como la consulta ciudadana, y de fortalecimiento de la participación ciudadana.

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El Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) es la autoridad encargada de organizar las elecciones y los procedimientos de participación ciudadana en la Ciudad de México. Además de promover la celebración de elecciones, la educación cívica y el ejercicio pleno de los derechos político-electorales de grupos vulnerables, el IECM fomenta la participación decidida de los habitantes de la Ciudad en la vida colectiva de sus barrios, colonias y pueblos.

Por su destacada labor en esos campos, el IECM ha recibido distintos reconocimientos nacionales e internacionales. Entre los más importantes, el distintivo “Código L”—por haber instalado un lactario institucional y por fomentar una cultura de respeto, igualdad de género y promoción de los derechos humanos—así como el certificado de cumplimiento de la Norma Mexicana en Igualdad Laboral y No Discriminación—el primer organismo público de la Ciudad de México en recibirlo. Sobresale también que el IECM fue el primer organismo electoral local en el mundo en conseguir la certificación ISO 17-582—conocida como “ISO electoral”—norma específica para organismos electorales que garantiza que su funcionamiento y procedimientos cuentan con los más altos estándares internacionales de calidad.

En la reunión afloraron coincidencias sobre los beneficios de que la ciudadanía se involucre más en los asuntos públicos. Primero, porque consultar a la ciudadanía enriquece la deliberación pública y, en consecuencia, la formulación de políticas públicas. Segundo, porque induce mayor transparencia en los procesos y decisiones de las autoridades, pues hay más ojos que miran su actuación. Tercero, porque genera más controles que fortalecen la rendición de cuentas; a medida que los ciudadanos se involucran en los asuntos públicos, se vuelven más exigentes con las autoridades.

Por otra parte, Miguel Angel Lara Otaola refirió al consejero Yuri Beltrán –y puso a disposición del organismo local– la experiencia técnica y el conocimiento comparado con los que cuenta IDEA Internacional. Destacó tres líneas temáticas de la organización: participación ciudadana, rendición de cuentas democrática y nuevas tecnologías, elecciones y democracia. En especial, dio cuenta del Manual de democracia directa (2008), obra que analiza comparativamente mecanismos de participación directa en todo el mundo, incluyendo referéndum, iniciativas ciudadanas, revocación de mandato y agenda ciudadana; así como de la base de datos que concentra la información con la que se elaboró el libro. También citó el Manual sobre participación, representación, gestión de conflictos y gobernabilidad (2002), que ofrece un análisis práctico de conceptos clave y herramientas esenciales para profundizar la democracia local. Por último, aludió a dos publicaciones dedicadas a promover la participación de grupos poblacionales específicos: Incrementar la participación de los jóvenes a lo largo del ciclo electoral: puntos de entrada para organismos de administración electoral (2016) y Superar la exclusión política: estrategias para grupos marginalizados para involucrarse exitosamente en la toma de decisiones (2013).

Gracias a ese cúmulo de experiencias y conocimientos, IDEA Internacional puede contribuir a que los procedimientos de consulta a la ciudadanía se realicen según estándares internacionales e incorporen las mejores prácticas en la materia. Asimismo, puede proveer asistencia técnica en ejercicios de vinculación directa con la ciudadanía, como los presupuestos participativos, para que más personas se involucren en ellos y para que, con apoyo de las nuevas tecnologías, su alcance y efectos se magnifiquen.